Con la llegada del otoño comenzamos a pasar más tiempo en casa. Regresan las rutinas, las horas de luz son más cortas y aumenta nuestro consumo energético.
El uso de electrodomésticos, sistemas de calefacción, televisión, videojuegos, ordenadores o, incluso, juguetes si hay niños en casa, hacen que el consumo se note en la factura de la luz.
Pequeños gestos para ayudar al medio ambiente
Si este año quieres ahorrar en la factura de la luz y adquirir hábitos más sostenibles y respetuosos con el medio ambiente debes tener en cuenta las siguientes recomendaciones a la hora de utilizar tus aparatos eléctricos y electrónicos:
1 – Planifica las horas de consumo de tus electrodomésticos, así evitarás encender todos a la vez y el consiguiente incremento en la factura de la luz. Por ejemplo, aprovecha a poner el lavavajillas durante la noche y la lavadora los fines de semana.
2- Vigila el consumo silencioso, acostúmbrate a desconectar los aparatos eléctricos y electrónicos que no estés utilizando. Aunque aparentemente estén apagados, siguen consumiendo energía solo por estar enchufados a la red. Esto es lo que conocemos como el stand by de aparatos como el televisor. Evita que tus aparatos tengan el piloto que indica que están encendidos cuando no los vayas a utilizar.
3 – Revisa tu iluminación, sobre todo en aquellas zonas de la casa que sean más utilizadas como el salón o la cocina. Opta por luces LED ya que aunque su precio es más elevado que las habituales consumen menos energía que las bombillas tradicionales.
4 – Contrata una potencia de luz ajustada a tu consumo, analiza tu consumo mensual para ajustar al máximo la electricidad que puedes consumir en tu hogar de manera simultánea. Esto se notará en el recibo de la luz reduciendo tus costes fijos.
5 – Apuesta por electrodomésticos eficientes energéticamente, esto lo podrás saber con el etiquetado de los aparatos eléctricos y electrónicos. Existen diferentes niveles y grados en relación a la etiqueta energética por lo que antes de comprarlos analiza estas cuestiones al detalle.
Recuerda siempre que antes de tirar puedes dar una segunda vida a tus aparatos eléctricos y electrónicos. Si funcionan pero no los vas a seguir usando: dónalos o entrégalos en uno de los puntos habilitados para su recogida.
Repara siempre que sea posible y recicla cuando ya no estén en funcionamiento.
